sábado, junio 07, 2008

ORACIÓN: " VIVIR EN EL ESPIRITU DE JESUS"

TÍTULO
ORACIÓN: “VIVIR EN EL ESPÍRITU DE JESÚS “
POR: Prof. MERVY ENRIQUE GONZÁLEZ FUENMAYOR.

Maracaibo-Estado Zulia-Venezuela-América del Sur.

Impresa el día sábado 07 de Junio de 2008, Hora: 09:50 p.m.

Tomada de su versión original: Miercoles 04 de febrero de 1998




Autoría del Prof. Dr. Mervy Enrique González Fuenmayor

Maracaibo, Sábado 07 de Junio de 2008

(Fragmentos elegidos de la sección: "MERVY GONZÁLEZ ESTÁ CONVERSANDO CON…” que formó parte de un programa radial en el que participó como conductor por espacio de cuatro años aproximadamente: 1996, 1997, 1998, 1999, que se trasmitía en una estación radioeléctrica ubicada en la ciudad de Maracaibo-.Estado Zulia.- República Bolivariana de Venezuela. América del Sur).





O R A C I Ó N

Alzo mis ojos hacia las montañas ¿De donde me vendrá la protección? La protección me viene del señor que hizo el cielo y la tierra. El no permite que tú pie resbale. Tu guardián nunca duerme, no se duerme ni se adormece el guardián del pueblo de Dios. El señor es tu guardián. Él señor es tu sombra a tu lado. De día no te hará daño el sol, ni de noche tampoco te hará daño la luna. El señor te guardará de todo mal. El guardará tu vida. El señor guarda tus idas y tus venidas ahora y siempre. Amén y amén..


C O M E N T A R I O
(APLICACIÓN A NUESTRA VIDA)

No existe mejor momento que aquel que buscamos o se presenta para conversar con el señor, al situarnos en su santa presencia, infinitos y hermosos efluvios de su amor y paz inundan todo nuestro ser , nuestra mente y espíritu. Y en esta oración amigo y amiga radioyentes hemos sentido la ternura, la misericordia y el dulce amor del buen Jesús. Es una oración hermosísima, este diálogo nos permite concluir que en ningún momento estamos ausentes ni carentes de la protección de Dios. En el día el sol no nos hará daño y en ésta alegoría lo que realmente debemos entender es que ninguna de las fuerzas que se muevan en el día podrán causarnos ningún tipo de daño, sean estas fuerzas terrenales, del mundo acuático, del submundo , del espacio sideral o de cualquier otro lugar imaginado o no por persona alguna. Pero de noche tampoco el señor nos deja y por el contrario vela nuestro sueño, para impedir que las fuerzas de la oscuridad puedan tomarnos y hacernos sus víctimas, habida cuenta de la indefensión que presentamos cuando nos entregamos a nuestro sueño reparador. El señor guarda nuestras idas, pero también nuestras venidas. Y con esto se reitera ese profundo amor que Dios nos tiene y en consecuencia durante toda nuestra actividad y aún en el caso de nuestro descanso, el siempre nos acompañará con su amor, con su misericordia, con su poder, con su discernimiento, con su sabiduría y con su fuerza universal protectora. Dios es nuestra plenitud, el dador de nuestra vida, aquel que nos provee de todo cuanto necesitamos, es el quien nos da la auténtica paz, el auténtico equilibrio, la verdadera y única felicidad, la vida eterna, la consecución aún de aquello que no hemos deseado y pensado. Gracias Dios, te alabamos, te bendecimos, reconocemos en ti señor Jesús al hijo de Dios, al mesías, a nuestro salvador. Ante ti nos postramos y colocamos nuestra barbilla en tierra y te decimos a todo pulmón y con la máxima tonalidad de voz que fuere posible , que eres todo para nosotros, significas tanto señor para nosotros que es imposible vivir sin ti, sin tu infinito amor, sin ésa gracia y santidad que viene de ti y que tu nos regalas, sin esa ternura tuya que convierte nuestros agobios, enfermedades, calamidades y tristezas en alegría autentica. En paz verdadera, en salud, gracia, santidad, bienestar, gozo, sabiduría, ecuanimidad, luz, armonía, en reconciliación contigo y con la humanidad. Gracias Señor bendito sea tu santo nombre, que toda rodilla, potestad o principado se doble ante ti......
N O T A D E L A U T O R


AMIGOS Y AMIGAS, esta oración con comentario incluido, forma parte de una larga lista de ellas y que movido por el Espíritu Santo, ofrendaba al Señor de Lunes a Viernes a las siete de la mañana, en un programa radial de opinión, en el que participaba en compañía de una periodista, en el cual mi persona le dedicaba tres minutos o más (dependiendo de la Producción y/o de Máster) a orar y analizar esa oración aplicándola a la cotidianidad de nuestra vida, de nuestros actos, de nuestras, alegrías, tristezas, éxitos, fracasos, tragedias, tribulaciones, bonanza, prosperidad, bienestar, etc. Todo con la intención de establecer como verdad aquella según la cual Dios siempre está con nosotros, que todo lo que nos ocurre es para bien, que existe un plan o proyecto de salvación para cada uno de nosotros diseñado por el mismísimo Dios, cuyo cumplimiento, decisión y elección depende de ti. Así que -parafraseando la escritura bíblica- “DIOS NOS HIZO SIN NUESTRO CONSENTIMIENTO, PERO NO NOS SALVARÁ SIN QUE LE OFREZCAMOS ESE CONSENTIMIENTO”. ES DECIR, NUESTRO PERMISO Y AUTORIZACIÓN. El Señor es un caballero, y está siempre a las puertas de nuestro corazón, para que le abramos y pueda entrar para guiar nuestra vida y ofrecernos su santidad, gozo, alegría, discernimiento, sabiduría, y sus infinitos dones espirituales y materiales. Esa estación radioeléctrica está situada -todavía está al aire- en la ciudad de Maracaibo, Estado Zulia, República Bolivariana de Venezuela

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