LA NOTA CORTA
POR PROF. DR. MERVY ENRIQUE GONZÁLEZ FUENMAYOR
MARACAIBO. ESTADO ZULIA. VENEZUELA. AMÉRICA DEL SUR.
SÁBADO 30 DE AGOSTO DE 2008.
“LOS PEQUEÑINES Y EL MAL EJEMPLO"
La enseñanza y educación de los niños no es una cosa que se pueda tomar de manera ligera, alegre y olímpica. Las realidades nos obsequian los peores rostros en relación con esta situación. Efectivamente en un grueso bastante numeroso de hogares, casas y familias, pareciese que lo que ocurre es diametralmente opuesto a lo aconsejable en la educación, preparación, formación y orientación de nuestros niños. He visto personalmente como algunos padres frente a la situación de que su hijo haya aprobado el examen que tenía previsto para un día determinado, sin haber estudiado para el mismo. Y en lugar de recriminar esta actitud o conducta y explicarle a ese pequeñín el porque no debió actuar esa manera, no solamente son responsables por esta omisión, sino que además " le festejan la gracia " al querubín, afirmando que " este hijo mío es tan inteligente, que incluso es capaz de aprobar un examen sin haber estudiado”. Este solo hecho por supuesto no nos daría la razón, si se tratara de la hipótesis de un niño precoz o con un elevado coeficiente intelectual. El caso es que se trata de niños normales, pertenecientes a la media, desde el punto de vista de su inteligencia. Por ello no se puede premiar, ni reconocer como positiva la actitud estos padres y mucho menos la conducta del pequeñín. En otra oportunidad quedé pasmado frente a la escena siguiente: el querubín regresó de la escuela con más útiles escolares que los que llevó, creo que se trataba de un lápiz, un sacapuntas, un rompecabezas y un compás. Ante semejante hecho, los padres solamente atinaron a decir, "que listo es mi hijo ". Luego le recriminaron muy suavemente y sin ninguna otra orientación por lo que había hecho, lo que no era correcto. Pero con el tiempo pude constatar que no lo habían obligado a devolver esos útiles y que tampoco le habían instado a ofrecer las correspondientes excusas y el arrepentimiento a sus compañeros de escuela.
Como docente universitario he de afirmar, sin tener de la menor duda, que los actos de corrupción, de engaño y de fraude comienzan desde la primera edad, es decir desde la infancia. Esta afirmación severa y cruel tiene su asidero no en la conducta propiamente dicha de esos pequeñines, sino más bien en la actitud de alcahuetería, apoyo y equivocada solidaridad de los padres con sus hijos. A veces se peca por la ignorancia de los padres que consideran que no deben corregir con autoridad a sus hijos porque " según la psicología actual, si reprimes o corriges a tus hijos, ello puede ocasionarles un trauma y hacerlos infelices el resto de sus vidas”. Olvidan estos padres que la propia palabra del señor nos orienta y nos enseña en el sentido de que la autoridad sin disciplina, no es autoridad. Por lo tanto la autoridad requiere para su ejercicio, de pequeñas dosis de disciplina, corrección y sanción. La autoridad no deviene únicamente del hecho de ser padres, sino del respeto que se les debe tener a nuestros mayores, independientemente de que tengan algún parentesco con los pequeñines. La autoridad se vincula más con la moralidad, la ética, el recto proceder de quien la ejerce. Entonces que quedará para estos pequeños si los padres les marcan o exhiben un comportamiento ajeno a lo correcto, a lo ético, a lo honesto, a lo responsable y a lo justo.
Si no se enseña al pequeño que hay que actuar siempre de manera transparente, justa, honesta y con la verdad, siempre de por medio, lamentablemente estaremos formando seres proclives a las desviaciones más comunes de la sociedad, tales como la corrupción, el robo, el engaño, el fraude, la injusticia, la deshonestidad, la in, para que comprendamos lo grave de lo que está ocurriendo en nuestras propias narices. En lo que se ha expresado están las razones del porqué, un niñito portando un arma de fuego asesina a varios de sus compañeritos, o asesina a su maestro. También explica porque un estudiante universitario con un arma también de fuego asesina, sin conocer inclusive, a otros estudiantes de su universidad. Pero la moneda también ofrece otra cara, que es la de los padres entregados al alcoholismo, a las drogas, a las perversiones sexuales, y a las conductas reñidas con la verdad, la justicia y la moralidad.¿ Que ejemplo pueden dar estos padres a sus hijos? Afortunadamente no son todos los padres que adoptan esta actitud o conducta, ni tampoco esta nefasta realidad existe en todos los hogares del planeta, ni en todas las familias. Existen padres ejemplares, familias honestas y pequeñines que son todo un ejemplo de conducta. En esta nota corta he querido poner de relieve estos males para que puedan ser corregidos, siempre Dios nos da otra oportunidad de enmendarnos, de corregir nuestros errores, de transformarnos interiormente para que podamos transformar nuestro entorno y nuestros procederes. Pido a Dios que se derrame en bendiciones, en misericordia, es sabiduría e inteligencia divina sobre todas las familias del mundo, y sobre todos sus integrantes: padres, madres, hijos, hermanos, tíos, abuelos, primos etc. para qué este mundo se transforme en un mundo más humano, más justo, más solidario y más cristiano. Ánimo, gozo, alegría...
ETIQUETAS: alcoholismo, pequeñines, auctoritas, disciplina, ejemplos.
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